Kurt Cobain: ¿Qué decía la carta que dejó antes de morir?
Como se sabe, el 5 de abril de 1994, el líder de la banda Nirvana, Kurt Cobain falleció. Y es que el músico se cerró en el invernadero de su casa en Seattle, Estados Unidos. Ahí, lamentablemente el cantante decidió quitarse la vida, dejando una extensa y misteriosa carta que sigue siendo noticia a más de dos décadas de su muerte. Hoy en radio Oasis, te contamos que decía en ese escrito.
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KURT COBAIN Y LA CARTA MISTERIOSA QUE DEJÓ ANTES DE MORIR
Esta carta estaba dedicada a Boddah, su amigo imaginario de la infancia. El cuerpo de Kurt fue encontrado tres días después de su muerte, por un electricista que había ido a instalar un sistema de seguridad. Los forenses tuvieron que constatar la identidad a través de huellas digitales.
Después de que se le realizó un estudio toxicológico, se halló que el artista tenía grandes dosis de heroína en la sangre.
¿QUÉ DECÍA LA CARTA DE DESPEDIDA?
En la extensa carta que Kurt Cobain dejó, se evidenció que sufría de depresión y no quería continuar con su vida. Comienza a escribir el artista en su carta para su amigo Boddah.
Hablando como el estúpido con gran experiencia que preferiría ser un charlatán infantil castrado. Esta nota debería ser muy fácil de entender. Todo lo que me enseñaron en los cursos de punk rock que he ido siguiendo a lo largo de los años, desde mi primer contacto con la, digamos, ética de la independencia y la vinculación con mi entorno ha resultado cierto".
Además, reveló que no se sentía feliz haciendo música. Ya hace demasiado tiempo que no me emociono ni escuchando ni creando música, ni tampoco escribiéndola, ni siquiera haciendo rocknroll. Me siento increíblemente culpable. Por ejemplo, cuando se apagan las luces antes del concierto y se oyen los gritos del público, a mí no me afectan tal como afectaban a Freddy Mercury, a quien parecía encantarle que el público le amase y adorase. Lo cual admiro y envidio muchísimo".
"De hecho, no los puedo engañar, a ninguno de ustedes. Simplemente no sería justo ni para mí. Simular que me lo estoy pasando el 100% bien sería el peor crimen que me pudiese imaginar. A veces tengo la sensación de que tendría que fichar antes de subir al escenario. Lo he intentado todo para que eso no ocurriese. Y sigo intentándolo, créeme Señor, pero no es suficiente".
"Sólo hay bien en mí, y pienso que simplemente amo demasiado a la gente. Tanto, que eso me hace sentir jodidamente triste. El típico Piscis triste, sensible, insatisfecho, ¡Dios mío! ¿Por qué no puedo disfrutar? ¡No lo sé! Tengo una mujer divina, llena de ambición y comprensión, y una hija que me recuerda mucho como había sido yo", acotó.
Asimismo, muestra preocupación por su propia hija, Frances, debido a que no le gustaría que sufriera su mismo destino.
"Llena de amor y alegría, confía en todo el mundo, porque para ella todo el mundo es bueno y cree que no le harán daño. Eso me asusta tanto que casi me inmoviliza. No puedo soportar la idea de que Frances se convierta en una rockera siniestra, miserable y autodestructiva como en lo que me he convertido yo. Lo tengo todo, todo. Y lo aprecio, pero desde los siete años odio a la gente en general. Sólo porque parece que a la gente le resulta fácil relacionarse y ser comprensiva".
¡Comprensiva! Sólo porque amo y me compadezco demasiado de la gente. Gracias a todos desde lo más profundo de mi estómago nauseabundo por sus cartas y su interés durante los últimos años. Soy una criatura voluble y lunática. Se me ha acabado la pasión, y recuerden que es mejor quemarse que apagarse lentamente. Paz, amor y comprensión. Kurt Cobain".
Luego, añadió: "Frances y Courtney, estaré en su altar. Por favor, Courtney, sigue adelante por Frances, por su vida que será mucho más feliz sin mí. Los quiero", finalizó el musico.
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